Ten Candles
Ten Candles es un juego de rol narrativo que se juega a la luz de las velas. ¡Descúbrelo con nosotros!
Ten Candles es uno de los juegos que más nos ha sorprendido en los últimos años, y siempre decimos que es increíble que aún no se haya editado en español. Pero no os preocupéis, porque estamos haciendo nuestros pinitos de traducción para que no suponga ningún problema jugarlo.
Ten Candles es un juego de horror trágico. Y es un apunte importante, porque ningún personaje va a sobrevivir. Esto no es un juego de survival horror, pero debes jugar como si tu personaje fuera a sobrevivir. El escenario por defecto es el de un apocalipsis sin sol en el que Ellos han llegado. A partir de ahí, y con el escenario como complemento, son los jugadores los que rellenan los huecos y dan vida a la ambientación, mientras las velas se apagan poco a poco y la partida llega a su inevitable final.
La creación de los personajes es rápida, pero muy potente, con rasgos que deben interpretarse y quemar (literalmente) durante la partida. Las velas se van encendiendo mientras se crean los personajes, con lo que los jugadores ya se van metiendo en ambiente en el proceso, y el módulo de ambientación se presenta también en medio de la creación de personajes. por último, se graba un mensaje interpretando a tu personaje. Esto es algo que no hemos logrado que fuera lo suficientemente importante. Hemos probado a grabarlos en otra habitación (idea sacada de Alice is Missing), pero no logramos dar con la tecla. Quizá un día lo logremos sin saber por qué.
El sistema está muy pensado para este juego. Los jugadores tiran dados de una reserva comunal, tantos como velas haya encendidas en ese momento. Con un seis o más tienen éxito en el conflicto, y apartan los unos de la reserva comunal, que no podrán usarse en posteriores conflictos. Si fracasan, se apaga una vela, la reserva se recupera hasta el número de velas encendidas y se le da al Director los dados restantes. El Director no tira para ver si los personajes tienen éxito o no, sino para conseguir los derechos de narración para ese conflicto. Esto crea un efecto muy bueno, porque los jugadores al principio tiran muchos dados y al final muy pocos, justo al revés que el Director. Pero también nos ha ocasionado problemas, porque a veces las escenas se sucedían muy rápido y otras veces nos quedábamos sin ideas para crear más conflictos. Cosas de los dados.
Cuando se apaga una vela, se hace una ronda en la que los jugadores establecen verdades sobre el mundo o lo que está por venir, que siempre acaba con la última verdad:
Estas cosas son verdad. El mundo es oscuro. Y estamos vivos.
Esto se hace tantas veces como velas sigan encendidas.
Y éste es el juego a grandes rasgos. Un juego que no requiere preparación, ideal para one shots, con diecisiete módulos de ambientación (y hay bastantes más en la primera impresión e internet), desde lo más naive a alguno bastante bizarro. No perdáis la oportunidad de probarlo si algo de lo que os hemos contado os llama la atención.
¡Nos vemos!